jueves, 30 de enero de 2014

Juan Salvador Gaviota.

Juan Salvador Gaviota es un libro escrito por Richard Bach, cortito y fácil de leer. Solía ser uno de mis libros favoritos. Hace tiempo que no. Pero hoy ordenando los libros de las estanterías en el trabajo ha vuelto a caer un ejemplar en mis manos. Si eres de esas personas utópicas de las creen que siempre todo irá a mejor, podrías leerlo.

Cuando era una niña me parecía un libro maravilloso. Claro que entonces podía creer, tenía que creer en un futuro mejor. Uno donde volar libre, donde no sólo se durmiese y comiese.

durante muchos años conservé la esperanza de un futuro mejor: "cuando acabe en el colegio y vaya al instituto tendré amigas, algún chico se fijará en mí, nadie se meterá conmigo...". Las mismas esperanza tenía para cuando llegase al instituto y después a la universidad.

Ahora soy más realista. Mi piel está curtida por las heridas. No puedo creer. Tengo la sabiduría y la certeza de que nada cambiará. Mi vida siempre será igual (y rezo para que no empeore). Nunca alcanzaré el Nirvana (al menos no en vida).

"No aprendas nada, y el próximo mundo será igual que éste, con las mismas limitaciones y pesos de plomo que superar".
 
 

lunes, 27 de enero de 2014

Good person, bad things.

I am always alone.

Even if I go to College and later to work, even if I'm surrounded by a million of people on the streets or in the subway in New York.  I'm always alone.

Today also feel alone .


I 've come home after a particularly hard day, and obviously there no one was waiting for me.
Nobody had outstretched arms waiting to welcome me.
Today I feel empty except for the micro  universe of anguish that expands each day a little bigger in my chest. Today it hurts.Today I really longed for a warm, loving and protective arms around me. A soft voice with the utopic promise that everything will be better (I'm terrified of the possible options to get worse ).

Today it wouldn't have mattered to me who had had those arms, that voice: a lover, a friend, some of the filthy boarding school, the stupid fellow of High School, some unbearable client, my MOTHER, or even my father. Had given me equal.

Today I'd had phoned anyone just to hear any voice but checking my contact list I realized that my best option was the emergency service.

I have shrunk in the middle of the bed and I covered with the duvet which has drawn the outline of my body. I know I'm here because I see the quilt bent over my body. But I feel so empty... for me my skin is just that border, that shell containing nothing inside to prevent dispersal and real and finally disappears. Will I have any valve as beach balls to uncover it and deflate myself to completely disappear? Maybe this way I'd find peace, so maybe I can finally rest. Or rather, my conscience vanish and with it the memories, the pain ...


viernes, 24 de enero de 2014

Nada bueno en el cielo

A las personas buenas, sólo le pasan cosas malas.

Yo me considero una persona buena. No voy por ahí metiéndome con nadie, intento no hacer daño y si puedo, y me dejan intento ayudar el máximo posible dentro de mis posibilidades. Me arrastro por la vida dejando a los demás hacer libremente.

¿Por qué no pueden los demás hacer lo mismo conmigo? ¿Por qué siempre me hacen daño? ¿Por qué siempre me estafan? ¿Por qué siempre se interponen en mi camino?

Siempre estoy sola. Aunque vaya a la universidad y después al trabajo, aunque esté rodeada por un millón de personas en las calles o en el metro de Nueva York. Siempre estoy sola.

Hoy además me siento sola.

He llegado a casa, después de un día especialmente duro, y obviamente no había nadie esperándome. Nadie tenía sus brazos extendidos esperando para acogerme. Hoy que me siento vacía salvo por ese micro universo de angustia que se expande cada día un poco más en mi pecho. Hoy me ha dolido.

Hoy realmente he anhelado unos brazos cálidos, cariñosos y protectores entorno a mí. Una voz dulce y suave con la utópica promesa de que todo irá a mejor (me aterran las posibles opciones de ir a peor).

Hoy no me hubiese importado de quien hubiesen sido esos brazos, esa voz: de un amante, una amiga, alguna de las asquerosas compañeras de internado, de los estúpidos compañeros de instituto, algún cliente insoportable, mi MADRE o incluso mi padre. Me hubiese dado igual.

Hoy hubiese telefoneado al cualquiera para oír una voz amiga pero comprobando mi agenda me he dado cuenta de que mi mejor opción era el servicio de emergencias.

Me he encogido en medio de la cama y he cubierto con el edredón el cual ha dibujado la silueta de mi cuerpo. Sé que estoy aquí porque veo al edredón curvarse sobre mi cuerpo. Pero me siento tan vacía... que para mí mi piel es sólo esa frontera, esa cáscara que contiene la nada de mi interior para impedir que se disperse y real y finalmente desaparezca.

¿Tendré alguna válvula como las pelotas de playa para destaparla y desinflarme hasta desaparecer completamente? Tal vez así encuentre la paz, tal vez así pueda por fin descansar. O mejor, esfumarse mi conciencia y con ella los recuerdos, el dolor...

jueves, 9 de enero de 2014

Damned orthodontics / Maldita ortodoncia

This year as every year I've made my list of good intentions for 2014. One of the first on the list is to laugh more. Yes, because I can go weeks without do it. Even months without smile (if not take into account my professional smile to cater to customers).

Well, that was not my surprise when yesterday watching a comedy I tried to laugh (because I wanted) and I couldn't. Why stretch me the damned orthodontic's brakets? I don't understand it, is supposed that when you smile just move muscles not teeth!! I'll have to ask to the dentist.

Bad, bad I had started the good resolutions for the new year. .




Este año como cada año he hecho mi lista de buenos propósitos para 2014. Uno de los primeros de la lista es reír más. Sí, porque pueden pasar semanas sin que lo haga. Incluso meses sin sonreír (si no tenemos en cuenta mi sonrisa profesional para atender a los clientes).

Bueno, pues cual no ha sido mi sorpresa cuando ayer viendo una comedia se me ocurrió intentar reír (porque me apetecía) y no pude. ¿Por qué me estiran los brakets de la maldita ortodoncia? No lo entiendo, se supone que para sonreír se mueven los músculos no ¡¡los dientes!! Tendré que preguntar al dentista.

Mal, mal comienzan los buenos propósitos para el nuevo año.